Entrevista sobre cultura a Gustavo Petro

1.¿Qué lugar le asigna a la cultura en el desarrollo de la ciudad?

Tal como lo expresa la declaración del Buro Ejecutivo del CGLU (Ciudades y Gobiernos Locales Unidos) en su 3er congreso mundial en México 2010, acogemos la idea de la cultura como cuarto pilar del desarrollo sostenible: “el mundo no se halla exclusivamente ante desafíos de naturaleza económica, social o medioambiental. La creatividad, el conocimiento, la diversidad, la belleza son presupuestos imprescindibles para el diálogo por la paz y el progreso, pues están intrínsecamente relacionados con el desarrollo humano y la libertad”. La política del gobierno de una ciudad como Bogotá debe fundarse en la existencia de diferentes culturas, y en su protección constitucional, siempre y cuando no riñan con la Constitución, las leyes y las reglas mínimas de convivencia urbana. Una de las necesidades primordiales de los seres humanos es la sensación de identidad: ser reconocido en un espacio social más allá del ámbito limitado de la familia. El barrio es uno de ellos, pero pierde importancia a medida que la vida en la ciudad se hace más compleja. La vida en una ciudad como Bogotá se caracteriza porque abre muchos campos de identidad. El apoyo a las organizaciones sociales, que se describe como promover el aumento del capital social, es un objetivo del gobierno de los progresistas. Eso sí, el gobierno de la ciudad continuará fomentando una forma de identidad que es la garantía de una sociedad urbana fértil en la convivencia: la identidad con la ciudad.

2.Si asumimos la presencia de lo cultural en todas las dimensiones del desarrollo, ¿qué solución organizativa en la administración de la ciudad propondría Usted que permita  afirmar y articular efectivamente el fomento cultural a esas otras dimensiones del desarrollo?

Vamos a fortalecer la participación ciudadana  través de los consejos locales y centrales de cultura, dándole un lugar  a la cultura en todas las instancias de concertación relacionadas con  los planes de desarrollo sostenible.

3.De acuerdo con el Comité de Derechos Sociales, Económicos y Culturales, (CDESC), uno de los atributos del derecho a la vivienda adecuada es la adecuación cultural, ¿cómo interpreta este atributo y cuál será su programa de gobierno a este respecto?

Nuestros programas de reordenamiento urbano serán concertados con la ciudadanía, de esta manera garantizaremos la compatibilidad con las tradiciones, prácticas, necesidades y creencias de quienes se van a beneficiar con dichos programas. Claro está, teniendo como base el mínimo orden urbano sin el cual la vida en la ciudad no es posible. La ciudad es el espacio por excelencia en el que vale aquello de que la libertad de cada cual termina donde comienzan las libertades de los demás.

4.¿Cual es su propuesta para el fortalecimiento y organización del equipamiento cultural de la capital?

El modelo propuesto originalmente de “casas de la cultura”, que implica espacio cultural y forma de gestión, es el que intentaremos implementar, hasta llegar a uno por localidad, o dos o tres en las localidades con mayor población. Igualmente, implementaremos un gran corredor cultural por donde giren artistas de trayectoria y grupos barriales, creando un dialogo intercultural que genere procesos de identidad y cualificación en nuestros artistas.

5.La ciudad está acusando un deterioro de las fortalezas en cultura ciudadana desarrolladas a través de procesos formativos de gran impacto en años anteriores. ¿Qué estrategias  plantea usted para la reactivación de la cultura ciudadana?

Desde 2004 la promoción del cumplimiento de reglas de comportamiento en el ámbito colectivo, incluso aquellas que son ampliamente aceptadas, fue descuidada por el gobierno distrital. Las encuestas de Bogotá Cómo Vamos muestran una reducción impresionante en la imagen que tienen los ciudadanos de que a las autoridades les interesa cumplir su deber de conseguir un mínimo orden en la ciudad, y no es descartable que la pérdida de control en el tema de seguridad esté asociado a este hecho. Se produce así un sentimiento generalizado de “sálvese quien pueda”. Contrario a la vieja leyenda, los bogotanos mostraron con los programas de cultura ciudadana un gran deseo de colaborar con el orden. Durante los cuatro años regresaremos a darle importancia al tema, y a diseñar acciones eficaces para promover el cumplimiento voluntario de normas y la acción de las autoridades cuando ésta se necesite. No se hará como un programa “de cultura ciudadana”, sino como “acompañamiento de cultura ciudadana” en cada uno de los temas en donde se vea necesario.

6.El sector cultural es reacio a verse asimilado a  las lógicas de la industria y el emprendimiento. ¿Considera usted qué es importante afirmar esta relación? ¿Por qué? Y, de ser afirmativa su respuesta, ¿cuáles son las estrategias o acciones que Usted propone para  lograr esa relación?

En todo el mundo el consumo cultural ha crecido enormemente en los últimos 60 años, especialmente a través de medios masivos: se escucha música todo el día y toda la noche, se ven en televisión telenovelas de buena y de mala factura. El cine ha crecido, y el último año las producciones colombianas son las más taquilleras. Eso es consumo cultural, y no deja de ser cultura por ser masivo. Claro, por otro lado, hay expresiones que quedan desprotegidas, como el teatro y las artes plásticas. Aquí corresponde al Estado una tarea distributiva – hay sectores sociales que tienen muy poca oportunidad de elegir –una tarea de formación de público y una tarea de respaldo a los artistas y cultores, que tiene varios caminos. El Distrito lo viene haciendo, y lo seguirá haciendo.

7.Actualmente  se identifican grupos urbanos que conforman subculturas al interior de las grandes ciudades y desde los cuales se genera expresión, organización, acción política, trabajo comunitario, entre otras acciones. Está ¿Usted de acuerdo en apoyar estos grupos, afianzar sus diferencias y potencialidades? ¿Cómo lo propone?

La política de promoción de organización y de distribución de apoyo a actividades y expresiones culturales tendrán en cuenta estas subculturas, en el sentido de darle el adecuado respaldo. Es el deber del distrito en un Estado multiétnico y pluricultural. Los consejos sectoriales de cultura, contarán con representantes  de los grupos étnicos y  subculturas urbanas, y tendrán carácter decisorio en las instancias de concertación de la Secretaria de Cultura Recreación y Deporte.

8.¿Está Usted de acuerdo con que el Estado debe apoyar e incentivar tanto las grandes instituciones culturales como las pequeñas? ¿Cuáles serían algunos mecanismos adecuados en la búsqueda de una mayor equidad en el fomento a la cultura?

Apoyaremos a las grandes instituciones culturales, tan necesarias en una ciudad como Bogotá, y aumentaremos la inversión en las de pequeñas y nuevas instituciones. El Distrito debe encontrar las formas más eficaces de interacción público-privado para promover la expresión artística y la mayor apropiación por parte del público. Esta idea es central: eficacia en la interacción público-privado. Con organizaciones grandes y pequeñas, cada cual según su capacidad y experiencia.

9.Las tecnologías están generando nuevas maneras de encuentro, de relación, de comunicación, de participación, de construcción cultural y en ese sentido van más allá de una dimensión netamente instrumental. ¿Dónde sitúa usted la administración de este campo en el gobierno capital? ¿Cuál  es la responsabilidad y lugar del sector cultural en el mundo tecno- comunicacional?

Las TICS están formando la sociedad actual, la “sociedad informacional”. No es fácil prever cómo la sociedad las va usando y las consecuencias de los cambios en comportamientos sociales que están produciendo. No podemos asumir de entrada que todo lo que nos traen las TICS es bueno. La Secretaría Distrital de Cultura Recreación y Deporte, a través de su Observatorio de Culturas, estará atenta a estos temas, promoviendo la comunicación entre quienes los analizan. También la Secretaría puede fomentar iniciativas interesantes según se vayan presentando en el campo de los usos de estas tecnologías en aspectos de la cultura y el juego.

10.¿Cómo asume usted la gran diferencia de la inversión pública entre el deporte  y la cultura? Y, ¿entre el sector cultura y deportes con los demás sectores?

Nuestro propósito es incrementar de manera gradual la inversión en el sector cultura, de acuerdo a la recomendación de la UNESCO, en el sentido de que dicha inversión debe ser del 1% del PIB (Producto Interno Bruto) de la ciudad. En la actualidad es del orden del 0.3%.  Si a los ciudadanos les gusta más la práctica deportiva y los espectáculos deportivos que los culturales, es mejor intentar comprenderlo que oponerse. Muy poco público asiste a las competencias de atletismo. Incluso los espectadores para deportes más populares, como el béisbol, son pocos en Bogotá. En cambio, muchas personas asisten a presentaciones de artistas populares. Así que el balance entre “entusiasmo por los deportes y la cultura, y sus espectáculos”, no es claramente el que supone la pregunta. Entre otras cosas, en Bogotá es muy baja la práctica deportiva, y esto sí podría intentar remediarse, posiblemente a través de la ampliación de la jornada escolar.

11.En lo concerniente a las relaciones entre educación y cultura, éstas parecieran ser dos instancias separadas en la ciudad. Tanto en su concepción, como en la relación de las instituciones que las direccionan  y en las inversiones que reciben. ¿Considera usted que esas esferas de la vida pública deben relacionarse aún más? ¿Por qué? En caso afirmativo, ¿qué propuestas trae su programa?

En la respuesta a esta pregunta voy a restringir “cultura” a formación artística, tanto en ejecución como en formación de público, pues de otra manera, nos saldríamos del marco de este cuestionario. Propongo el regreso de las áreas artísticas, deportivas y de idiomas al pensum académico de los colegios distritales, integrando a los artistas a la tarea de la formación integral de nuestros jóvenes. La articulación de los grupos culturales, casas de cultura y demás organizaciones dedicadas a la actividad artística, con los centros educativos distritales, de manera que las actividades de campo de los estudiantes incluyan la asistencia a sus eventos.

12.¿Qué es para Usted el gobierno de la cultura?

La cultura es un eje transversal que pasa por todas las instancias de la actividad humana. Nuestro gobierno pondrá especial énfasis en la preservación de nuestro patrimonio cultural y el dialogo intercultural, a través de la participación y la concertación ciudadana.